Los días de fiesta


 En los días de fiesta, los vendedores y vendedoras ambulantes se despliegan por la ciudad con sus racimos de globos multicolores. Yo, empiezo a perseguirles por las calles, con una idea compositiva en la cabeza: "llenar el encuadre, llenar el encuadre." Bueno, en realidad no persigo a nadie por ningún lado. Ha sido una pequeña concesión al relato. Simplemente me los encuentro, busco un punto de vista algo diferente, veo un spiderman que me mira desafiante, me acerco y disparo

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